Te admiro tanto, nunca te lo dije pero sí, te admiro tanto tanto. Tenes alas, alas enormes y no dudas en usarlas, sos libre, vivís como querés y me demostras que no necesito irme a ningún lado para sentir esa libertad que vos tenés. Sos un mar de paz infinita. Volás y nadie puede detenerte, solo vos. La siento, la siento corriendo por mis venas, bailando, rápido, muy. Y me emociona saber que es la misma que corre por las tuyas, la misma sangre, la misma composición. Me fascina. Nos dicen que somos iguales de rasgos, me miras y me río, de felicidad.
Me acuerdo el día que me hiciste escuchar The Strokes, The White Stripes y The Mars Volta. No te cansabas de darme todos tus cds para llenar mi mundo con tu melodía, y es el día de hoy que lo seguís haciendo. En este momento estoy escuchando el Score de Into The Wild, el de Michael Brook que me mostraste ayer y algunos temas de los tiernos de Kings Of Convenience, también presentados a mis oídos por vos. Y no puedo explicar lo que estoy sintiendo, es tanta satisfacción y felicidad pero combinadas. Es como una especie de combo. Un combo que me hace dar cuenta que te quiero, muchísimo , y te acepto con todos tus errores, que ahora no son nada más que la nada misma para mi. Porque yo también cometí errores, soy humana y vos también. Entonces te miro y me veo, mismo pelo, mismos ojos, mismos rasgos, misma piel. Mismos ideales, misma mentalidad, misma rebeldía por querer volar. Toda mi vida me dijeron que somos iguales y siempre quise saber por qué.. y ahora me doy cuenta que no hace falta, porque ya lo sé. Comparto mis cigarrillos con vos, fumamos, reímos, tocamos un par de canciones en la guitarra, hasta que nos quedamos en silencio. Me miras y me decís "Enseñame una canción", te sonrío y te enseño, como vos me enseñaste a mi por miradas.
Te vas a volar con los sonidos, y yo te guardo en mi, para siempre.
No comments:
Post a Comment