" Anyone who keeps the ability to see beauty, never grows old." (Franz Kafka)
No se esperaba ver ese cartel pegado en la ventana, esa frase, esa reflexión. Piensa. Se detiene.
De repente ya no le asustaba crecer, envejecer, arrugarse.
El porvenir..
-¿Por qué ?- preguntó.
- Nosé - respondió , girando su cigarrillo entre sus dedos.
- Si sabés - insistió, fastidiosamente.
- No, nosé - dijo, con mirada fija, casi convincente.
- Si, sabés. Vos sabés todo. - le respondió, con seguridad y entre sonrisas cálidas.
Sí, sabía, y se lo dijo. Le dijo que había tanta belleza y tanto por descubrir, que el propio sentimiento de querer saber todo y ver todo al mismo tiempo te mantiene joven, no te arruga, ni te vuelve una pasa de uva. seca, sin vida. Te llena, tanto como cuando comes tu comida preferida y quedás más que satisfecho y contento. Tanto como cuando ves esas películas que ya viste mil veces, y sin embargo cada vez que las ves, descubrís algo diferente que antes habías pasado por alto. Tanto como cuando lees un libro, y te das cuenta que tiene toda la verdad y sentimiento encima, que hasta te inunda el sentimiento de querer hacerte (o haberte hecho) amiga del autor para explorar su cabeza y tener charlas eternas.
Eso. El ver toda la belleza y todos los acertijos, es lo que te mantiene tan joven y no te envejece, sino que te hace crecer,crecer cada vez más.
-Y bueno ,si creces... envejeces, ¿No? - Cuestionó, inseguramente.
-No, envejecer es morirse de a poco, morirte por dentro. secarte por dentro, arrugarte. escurrirte. Escurrir todos esos colores y desteñirse, volverse gris. Esto no es envejecer. Esto es crecer, ser inmortal internamente. Ver, descubrir detalles que nadie más ve, y también dejar que los otros te muestren los que vos no ves. - Respondió, tirando su cigarrillo al suelo, mientras observaba la gran sonrisa en el rostro que estaban viendo sus ojos.
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