You taste like birthday, you look like new year.

Ella hablaba de su viaje, y yo escuchaba el tic-tac del reloj invisible. Le servía una taza de té al porvenir.
Pensé en todos los lugares que le faltan trepar, en todos los corazones que le faltan palpar, en todo lo pequeño, casi diminuto, que le falta amar. En todo donde le falta dejar su chispita, su sonrisa en vida, su color de acuarela. Pensé en cuanto le falta al mundo verla, salpicarse en su esencia y vestirse de su destello. Pensé, en lo libre que es, en como ella viene en una brisa, acariciando almas con ese poquito de lo único que solo ella es, ese pedacito de pétalo de flor que crece en agua y sol, eso hermoso que baila de momento en momento y perdura.
La vi crecer, la vi ser, la vi viajar, la vi yendo de vida en vida, de esencia en esencia, la vi... y vi a través de ella. No quise más, que ese momento y todo lo que ella es. Amarla, bailar melodías traslúcidas en caminos todavía no cantados. Que sea, y no más que lo demás.

"(...) Ella baila porque bailando goza, y baila lo que quiere, cuando quiere y como quiere, y las orquestas callan ante la música que nace de su cuerpo."

- "Isadora"  Eduardo Galeano